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100x100, Serrat

100x100, Serrat  

Joan Manuel Serrat tocó anoche, y lo ahora de nuevo ésta de hoy, en Zaragoza, dentro de la gira "100x100 Serrat". El título no engaña. A lo largo de más de dos horas de concierto, que pasan en un suspiro, el catalán - de madre aragonesa como todos sabemos y él ha repetido tanto - hace una elección concienzuda y emotiva de muchas de sus mejores canciones. Subido, con sencillez y complicidad constante hacia los espectadores, a un escenario minimalista, Serrat parece andar haciendo recapitulación, balance, asunción de una nueva etapa que sin duda habrá empezado para él a raíz de su enfermedad. Quizás por eso lo que Serrat transmite en este concierto es tanto una enorme ilusión y fortaleza como una buena dosis de la fina  ironía propia de quien ya sabe mucho, de esa socarronería, de esa retranca propia del sentido de la vida tan mediterráneo del que Serrat siempre ha hecho gala.

 

            Arranca el concierto con "Menos tu vientre", el poema de Miguel Hernández que tanto ha cantado. A continuación un "Mediterráneo" más tembloroso que nunca y más apegado al atardecer que antaño. Joan Manuel Serrat ha bajado el tono de su voz, ha bajado su potencia, pero ha ganado tantos sabios matices de interpretación que sus canciones de siempre se han acomodado ya con nueva personalidad a este otro escenario vital desde el que las canta. Eso me gustó, porque demuestra sapiencia y sensibilidad.

 

            Después de estos dos sabrosos bocados de apertura vinieron un buen puñado de magnífica y entrañables canciones (Cantares, Esos locos bajitos, Tu nombre me sabe a yerba, Señora, Penélope, No hago otra cosa que pensar en ti, Romance de Curro el Palmo, Hoy puede ser un gran día, Fiesta, etc, etc.) Sólo cantó una canción en catalán, una canción popular llegada desde el siglo XVIII, Canço del lladre. Y yo eché de menos canciones de , el último disco, que a mi me gusta tanto y que me parece que hay que colocar entre los discos de oro de la trayectoria profesional de Serrat. Me parece que Joan Manuel Serrat, en su afán por acercarse a todos nosotros, ha eliminado estas canciones en esta ocasión. Pero yo creo que todos nos hubiéramos esforzado un poco. Sus incondicionales ya nos las conocemos y no encontrarlas en el concierto fue una mica decebedor.

 

            De todas formas fue el de ayer un recital cuajado de tantas complicidades, de tantos guiños, que se notaba continuamente la corriente de emoción que circulaba entre el aforo y el escenario. Todas las canciones fueron aplaudidas, todas las canciones fueron tarareadas muy bajito, como sin querer romper la magia que Serrat crea él solo sobre el escenario. Cantando. Pero también contando. Contando unos magníficos monólogos sobre la vida que no son sino una prolongación de lo que pinta en los textos de sus canciones y que Serrat desgrana sobre las notas del piano del fiel Ricard Miralles.

 

            Por supuesto que la ovación prolongada y con la gente en pie  del final fue muy emocionante. Yo creo que todo el público que estuvo ayer en la Sala Mozart del Auditorio de Zaragoza quiso agradecerle todos los años de música y vida compartidos. Quiso que supiera que le queremos, porque es uno de los nuestros.

 

            Prefiero colocar aquí una de las últimas canciones, "Cremant núvols", perteneciente a , que me parece un magnífico reflejo de la vitalidad de este Joan Manuel Serrat de hoy.

 

 

 

CREMANT NUVOLS

 

Cremant núvols passa el sol
vertical i el món s'atura.
Demanant pietat al foc
s'amaguen les criatures

a l'ombra de qualsevol
ombra que Déu els procura.
Cremant núvols passa el sol.

El dia cau de genolls
pidolant la migdiada.
A les parpelles amb son
els rellisca un fil de baba

i tot dol i res no vol
i tot pesa i res no passa.
Cremant núvols passa el sol,
cremant núvols el sol passa.

L'ànima abandona el cos
tèrbola i embriagada.
Fantasia d'una mort
d'eternitat limitada.

No treu banyes el cargol
ni s'enfila a la muntanya.
Cremant núvols passa el sol.

Vigila en travessar el bosc
que als matolls, orfes de pluja,
podria calar-s'hi foc
si els freguessis amb les cuixes.

A l'ombra del teus llençols
t'espero, no triguis massa.

Cremant núvols passa el sol,
cremant núvols el sol passa.

Patrona dels inactius,
Santa Mandra del migdia,
protegiu l'amor furtiu
-si així ho vol Déu, així sia-,

especialment al juliol
quan, reclamant companyia,
cremant núvols passa el sol.

Cremant núvols passa el sol,
i tu i jo cardant a l'hora
que en altres contrades plou
i una altra part del món plora.

Uns de festa, altres de dol.
Uns lluiten, d'altres s'abracen.
Cremant núvols passa el sol,
cremant núvols el sol passa.

 

 

 

Traducción:

QUEMANDO NUBES


Quemando nubes pasa el sol
vertical y el mundo se detiene.
Rogando piedad al fuego
se esconden las criaturas

a la sombra de cualquier
sombra que Dios le procura.
Quemando nubes pasa el sol.

El día se hinca de rodillas
mendigando la siesta.
De los párpados, con sueño,
resbala un hilo de baba

y todo duele y nada quiere,
y todo pesa y nada pasa.
Quemando nubes pasa el sol.
Quemando nubes el sol pasa.

El alma abandona el cuerpo,
turbia y embriagada.
Fantasía de una muerte
de eternidad limitada.

No saca los cuernos el caracol
ni se encarama por la montaña.
Quemando nubes pasa el sol.

Cuidado al cruzar el bosque
que los matorrales, huérfanos de lluvia,
podrían arder
si los rozaras con los muslos.

A la sombra de tus sábanas
te espero. No tardes demasiado.

Quemando nubes pasa el sol.
Quemando nubes el sol pasa.

Patrona de los inactivos,
Santa Pereza de la tarde,
proteged el amor furtivo
-si así lo quiere Dios, que así sea-,

especialmente en julio,
cuando reclamando compañía
quemando nubes pasa el sol.

Quemando nubes pasa el sol
y tú y yo echando un polvo mientras
en otros rincones llueve
y otra parte del mundo llora.

Unos de fiesta, otros de luto.
Unos luchan, otros se abrazan.
Quemando nubes pasa el sol.
Quemando nubes el sol pasa.

 

* La foto de Joan Manuel Serrat viene desde la web de Sony (http://www.click2music.es/fotos/gr_serrat_06.jpg)

7 comentarios

Luisa -

Así es. Y lo bueno es que ha seguido acompañándonos muchos años y ahí sigue siendo un referente siempre. A mi me produce además una gran ternura, como bien dices, hacia el amigo que siempre está ahí. Gracias por venir, Nora.

Nora Guffanti -

El Nano, a más que un artista de excepción, es como un amigo, un referente de épocas difíciles, en las que a pesar de no poder visitarnos(prohibido), estaba presente, atento, levantando su voz denunciando nuestro pesar; un abanderado de la coherencia, un clásico de la música, la poesía y por sobre todo "el gran amigo".

Luisa -

A mi también me fascina "Mediterráneo", Magda. Desde el primer momento en que la oí, hace ya mucho, siendo una adolescente de pocos años. Y como a ti, hay tantas y tantas canciones de Serrat que me gustan. Muchas de una forma especial, muy interior. Me alegro de haber compartido contigo las sensaciones del concierto, en distintos países y en distinto tiempo, pero con similar emoción. Un beso.

Antón, gracias por venir. Tengo pues tu cuento. Me ha gustado mucho. Gracias por él. Ya contaremos qué tal Pablo Milanés.

Luisa -

Es cierto, Fernando, había un punto de nostalgia, porque se hacía pausible el paso del tiempo y las circunstancias. Pero yo a Serrat lo siento como uno de los nuestros; es más que parte de la banda sonora de nuestro tiempo. Forma parte de las referencias culturales y sociales de este país y de muchos otros en Latinoamerica. Y yo creo que a cada tiempo y en cada circunstancia hay que exigir lo que corresponde. El concierto actual de Serrat está presentado a la medida de lo que él puede hoy comunicar y éso me parece inteligente.

antón Castro -

Querida Luisa:
He perdido desde este ordenador la dirección de tu e-mail. Dime qué es lo que te va mejor: un cuento, un poema, lo que quieras, y te lo envío en este mes de noviembre.

Un beso. Me da un poco de envidia no haber oído a Serrat. Hace muchos años que sólo lo escucho en disco.

Tampoco iré a Milanés. Tengo aquí su último disco y no me gusta mucho. Gracias y que paséis unas espléndidas fiestas.AC

Magda -

Mediterraneo me fascina, Luisa, No hago otra cosa que pensar en ti, y todas las que aquí mencionas. Lo vi hace unos meses aquí en México y justamente como cuentas. Aqui se le quiere muchisimo, es siempre un placer verlo y escucharlo. Me encanta.

Muchas gracias por platicar esta gran velada.

Fernando -

¿Quién no va a cobijar en sus brazos a un ruiseñor?. Yo sentí ternura y una pequeñas gotas de tristeza, quizás no sólo por él, también por mí y el tiempo que hemos caminado con sus canciones a lo largo de su dilatada carrera y de la que ya empieza a pesar, vida.