Poetizando - 12
Asi fue un largo atardecer en la costa bretona de Concarneau
Si en esta hora de la caricia roja y el mar azul,
- cuando la luz como un ovillo salta entre mis manos
estirando delgadísima la línea esquiva
del presentimiento, - no estuvieras conmigo
sosteniendo en tus ojos mi mirada y su sombra,
yo no podría contemplar el mar que avanza
por el cielo ni dejar que la arena crezca
en las ventanas.
3 comentarios
Luisa -
Gracias, Ybris, qué bueno poder compartir recuerdos y emociones diferentes con paisajes comunes.
Ybris -
sentí el ovillo de la luz crepuscular de Bretaña.
Y los ojos de ella sosteniendo mis miradas y mis sombras.
Al leerte ahora, el apacible recuerdo me llena de mar el cielo y de suave arena mis ventanas.
Aquí el fuerte beso que intente agradecer tanto grato recuerdo como me has resucitado.
Fernando -
y he vivido en el rojo carmesí de tus sueños,
tengo todavía un racimo de crepúsculos
para llevar a tus ojos.