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Poetizando - 16 (La línea del tiempo)

Poetizando - 16 (La línea del tiempo)

 

 

         La que fue una vez mi casa hubiera estado en esta antigua fotografía, de un tiempo muy anterior a que mi casa fuera, en el aire. En el aire suspendida mi cama, la mesa camilla y mi máquina de escribir, las precarias estanterías de palometas y conglomerados en las que se apilaban con orden mis libros, y éstos a su vez en el aire, como un pespunte de mis pensamientos. Mis plantas de entonces en el aire y sus hojas temblando entre las nubes, y también en el aire mi tiempo, visto desde ese otro tiempo anterior que para mi nunca ha sido y que sin embargo es, como ese tiempo mío, historia.

 

(Yo viví un tiempo en esta zona de la ciudad, en lo más alto de un alto edificio que estaría allí tiempo después de la fotografía.)

7 comentarios

susana -

gracias por nada

Luisa -

Es tremendo, Magda, cómo parece ser tan común esta sensación un tanto misteriosa de la línea del tiempo en nosotros, en los lugares donde hemos vivido y caminado; ese tiempo es sin duda nuestra unión al espacio. Nuestras vivencias se insertan allí, en el transcurso, junto a las de otros. No sé, es una muy extraña emoción, que a mi me resulta fascinante. Por eso me gusta imaginar mi ciudad en otras épocas. Hacer por ejemplo "Pan de Oro" me resultó, aparte de otras cosas, apasionante por ello. Transcurre en el siglo XVI y documenté bien el aspecto de la ciudad. Era magnífico poder pasear por las calles de entonces, entrar en los edificios... no sé.. Un beso.

Magda -

Fijate, Luisa, que curioso, justamente hace unos cuatro o cinco días hallé, sin buscarla (buscaba otra cosa totalmente diferente), un cuadro de un pintor mexicano con la calle adonde viví de muy pequeña, en la ciudad de Zacatecas al norte de México, una ciudad hermosísima. Sentí una opresión en el corazón porque en aquellos tiempos estábamos toda mi familia junta: mis padres, mis dos hermanos y yo. La imagen del cuadro (ya la pondré) se vfe que es del siglo 17 o 18 0 19, pero no del 20 porque aun no estaba pavimentada. Pero las casas alrededor, esa esquina que da la vuelta...

Que precioso vivir mirando el Ebro, Luisa, que recuerdos tan grandes, tan tuyos, tan guardados en el corazón...

Luisa -

Exacto, Mima, jugar con el tiempo... situarte en otro tiempo... dejar que ese otro tiempo forme realmente parte del tuyo... Me alegra mucho compartir estas sensaciones. Un beso.

lamima -

Que texto mas hermoso Luisa. Me uno a vosotras: yo también disfruto viendo como que era antes lo que veo ahora, y me intento ubicar allí...es como jugar con el tiempo.

Luisa -

¿Qué te voy a decir? Pues que exactamente es lo que tú has dicho. Estoy recopilando una serie de fotos antiguas de la ciudad, y cuando vi ésta, me dio un no sé qué. Veía ahí suspendido en el tiempo y en el espacio el edificio donde habíamos vivido, y sentía una especie de corriente temporal uniéndolo todo, algo que como dices sólo yo, sin embargo, podía ver.
Bueno, es tan emocionante haberlo sentido, como que tú me cuentes ahora ésto. Un abrazo.

Ybris -

Hay escritos que lees como si los escribieras tú mismo.
Eso me ha pasado al leer el tuyo, deslizándose suave como agua tibia entre mis dedos.
Y es que me encantan las fotos antiguas de los sitios en que he vivido hasta el punto de haberme conseguido las fotos de los vuelos fotogramétricos de las zonas corrspondientes desde 1957.
Cuando miro lo que aún no existía me siento como preso de la sensación de estar pendiente en el aire de un futuro que solo yo percibo.
Como si fuera un deseo completando con mis ojos algo que nadie más que yo podrá entender.
¿Hace falta decir que me ha encantado lo que has escrito?

Muchos besos.